En esta ruta propuesta se hace un recorrido por la Sierra de Irta, calificado de muy difícil por la dureza de las dos sendas que se recorren. Comenzamos en Alcocebre, empezando por una subida (carretera asfaltada) dirección a la Urbanización del Pinar, en la que encontramos desniveles de hasta un 20%. Una vez en dicha urbanización, abandonamos el asfalto para seguir subiendo por una pista forestal de tierra, hasta la Torre Ebrí. Desde allí llegamos al cruce que nos desvía del camino que va al Pico Campanilles. Empezamos a bajar para enlazar con la senda (complicada) de la carrera con tramos de cierta dificultad. Una vez abajo, toca remontar altura para subir al Castillo de Chivert. A partir de éste y por unos cuantos kilómetros de caminos entre pinos y falsos llanos que pican en bajada, éstos nos dejan a los pies de la subida, la cual empieza dura pero va inclinándose y estropeándose conforme va terminando. No es muy larga pero seguro que te hace bajar de la bici. Ya estamos en el punto más alto de la ruta y podemos contemplar unas vistas de la Sierra de Irta inmejorables. Ahora toca bajar por la segunda parte de la ruta y ésta es también difícil, sobre todo por su terreno rocoso y de piedras sueltas pero, a mi parecer, tiene menos zonas de riesgo. ¡Ojo! No se mate nadie... si no lo veis claro: pie a tierra. La senda nos deja en "la Font d'en Canes": se trata de un pozo infestado de avispas. Después, otro tramo de falso llano con subidas y bajadas, en el que pasaremos por el área recreativa de "la Caseta" donde se puede acortar la ruta bajando directamente hacia la Cala Irta. Si seguimos, pasaremos por el "Pou del Moro" y el área recreativa del manantial del Mas del Señor, donde suele haber agua potable. Con un tramo corto de subida llegamos al Collado d'en Berri, desde donde tendremos unas buenas vistas al bonito pueblo de Peñíscola. Continuamos con una bajada muy rápida por un camino en muy buen estado, pero cuidado con la velocidad porque tiene badenes. El camino termina en una urbanización, la cual bordearemos para empezar a subir de nuevo hacia la Torre Badum. En ella disfrutaremos de unas vistas al mar y calas que conforman esta costa y ya bajamos para coger el camino de la costa, camino con poco desnivel que dejamos para adentrarnos en la senda de la costa divertida y fácil. Yo me acerqué a una pequeña cala llamada "la cubanita". El camino nos llevará paralelos a la costa hasta salir a otro camino que nos llevará a la Cala Mundina y el Faro. Desde aquí pegados al mar volvemos Mediterráneo abajo hasta Alcocebre. El final está en la Playa de las Fuentes, curiosa playa en la que brotan manantiales en la misma arena y puedes incluso hundirte, ¡bueno! hasta la rodilla sólo. Ruta para todas las estaciones pero, para disfrutar del mar... ¡en Verano!
Aportado por Jack Fourny (Facebook)
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